Reconocer la huella del IES en las historias personales de sus egresados es una de las formas de subrayar el papel que juega la escuela a la hora de abrir e inspirar a los alumnos. Muchas ocupaciones y campos de interés se deciden cuando todavía se cursan los primeros años de la secundaria, y es por eso que el IES tiene como objetivo acercar a los estudiantes distintas instancias de aprendizaje. La historia de Gonzalo Rodríguez, ex alumno del IES y Dr. en Física, es un ejemplo claro de la importancia que reviste acompañar las trayectorias escolares en sus distintos momentos.
Gonzalo egresó del IES en 2009, de la Orientación en Ciencias Naturales. Al pensar en su escuela, lo primero que viene a su mente fue su participación en las Olimpíadas de Matemática, y no resulta casual, teniendo en cuenta la forma en que determinó su profesión: “Ahí descubrí un mundo apasionante y me di cuenta de que quería ser investigador. El IES siempre apoyó mucho en esta actividad, desde todos los aspectos. Había profes que nos entrenaban después de hora y acompañaban a cada una de las competencias”, recuerda. Entre estos profesores, Gonzalo recuerda a Silvia Guzmán, una de las que lo acompañó en los primeros pasos que dio en las Olimpiadas. Pero también hubo otros docentes que transmitieron algo más que los contenidos de sus asignaturas: “Recuerdo a Nicolás González, que nos transmitía su pasión en cada clase, y a Pamela Ruiz, a quien tengo mucho cariño”.

Uno de los momentos que suele ser muy recordado por los estudiantes del IES es el viaje educativo que realizan en 5° año, y Gonzalo no es la excepción. Su curso, en aquella oportunidad, viajó a Gualeguaychú: “Disfruté mucho ese viaje, en el que hubo que desarrollar un proyecto durante todo un año. Cerrarlo con encuentros con referentes en el área fue espectacular”.
Pensar en el IES es, para Gonzalo, pensar en su “segunda casa”. Pero en realidad, su afectuoso recuerdo se extiende a todo el IESS. Tal como es el caso de muchos estudiantes, Gonzalo empezó su formación en el Jardín de Infantes, luego pasó por la Escuela Primaria de Aplicación, hasta llegar al IES. Hasta sus 21 años, regresó al IESS como entrenador de las Olimpíadas en Matemática, un trabajo que contó con la ayuda de miembros de la Administración: “María Julia Gabba, Ivone Beyesdorf y María Eugenia Haggi me ayudaban en todo”. En términos generales, todos esos años fueron para él muy importantes en varios sentidos: “Ahí hice mis primeros amigos, aprendí, me desarrollé y hasta tuve mi primer trabajo. Respecto a la formación académica, las Olimpíadas me dieron un plus que ayudó inmensamente en mi adaptación a la facultad”.
Una vez terminado su ciclo en el IES, Gonzalo comenzó sus estudios en la Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación (FAMAF- UNC), donde obtuvo su Licenciatura y Doctorado en Física. Los frutos de su estudio y dedicación fueron noticia hace unas semanas cuando fue reconocido con el premio “Joven Investigador Paul Callaghan”. Este reconocimiento se otorga a jóvenes que se dedican a un área muy específica, en la que Gonzalo se destacó por sus aportes: “Es una distinción a jóvenes investigadores dentro del área de Resonancia Magnética con Resolución Espacial. Fue entregado en la Conferencia Internacional de Microscopia por Resonancia Magnética”, explica, y agrega cuáles fueron los requisitos que debió cumplir: “Para participar debías presentar una carta con tu historia académica y una publicación científica de tu autoría. Luego, el jurado seleccionaba seis finalistas para dar una charla en el Congreso y, en función de la calidad de la charla, se elegía el ganador del premio”.
Desde febrero de este año, Gonzalo reside en la ciudad de Nueva York. Si bien su llegada es bastante reciente, el cambio no resultó demasiado drástico: “La adaptación es bastante fácil porque es una ciudad que la mayoría de la gente es de afuera, entonces no te sentís un bicho raro”. Su traslado se debió a la necesidad de avanzar con su investigación, en tanto actualmente es Investigador Postdoctoral del Centro de Imágenes Biomédicas del departamento de Radiología de la Escuela de Medicina de la Universidad de Nueva York.
La carrera de Gonzalo tiene todos los condimentos de una profesión elegida con la curiosidad y la pasión que se presentan en los primeros años de formación. Se trata de un interés que contó con un marcado acompañamiento que hoy muestra sus enormes resultados.
Nota de la editora:
Estimado lector: son tantos nuestros egresados que están haciendo cosas interesantes que seguramente nos vamos a olvidar de un montón de ellos. Si conocés a algún egresado del IES cuya historia pienses que valga la pena contar o si te parece que tu propia historia como egresado es valiosa para presentar en esta sección de Modo IES, no dudes en escribir a: larevistadelies@gmail.com.