La nueva gestión del Centro de Estudiantes de IES cuenta finalmente con su profesor tutor. Dicha figura resulta fundamental para acompañar a los estudiantes del mencionado cuerpo en el proceso de toma de decisiones y organización de actividades y eventos que deseen realizar. Mediante una asamblea de los representantes de cada curso, se eligieron a cinco docentes que podían cumplir con la función, y fue el Equipo Directivo quien tomó la decisión final. Este año, el rol será desempaño por el Prof. Daniel Moreno.
A la hora de conversar sobre su designación, Moreno aclara los alcances y también los límites de su función: “Acompaño y le comento a los chicos cuáles son las limitaciones de lo que pueden o no pueden hacer; cómo pueden guiarse para organizar, por ejemplo, una charla; cómo se hacen los pedidos frente a Dirección o el Consejo Directivo”. En ese sentido, precisa Moreno, “el profesor tutor no genera las actividades, sino que acompaña las actividades que quiere generar el Centro de Estudiantes, porque es un órgano autónomo y representa la voluntad de los estudiantes”.

Los miembros del Centro tienen reuniones de trabajo con Moreno cada quince días, aproximadamente. En tanto docente, previo a su designación, el profesor acompañó a los estudiantes en el proceso de armado de las elecciones: cómo y cuándo armar las listas, las propuestas, explicar el estatuto del Centro, etc. Semanas atrás, Moreno tuvo la primera reunión con la actual gestión: “Les había anticipado que quería que en el primer encuentro me mostrasen cuáles eran sus propuestas, cómo pensaban desarrollarlas”. Las reuniones tienen un plazo de tiempo breve y acotado, ya que los alumnos deben seguir con el normal desarrollo de sus clases.
Desde su punto de vista como docente, Moreno considera que la figura de profesor tutor es clave para el funcionamiento y crecimiento de un órgano democrático como es el Centro de Estudiantes. En su experiencia, “siempre es compleja la organización, sobre todo cuando es gente que no necesariamente pasa todo el día junta, que son de distintos cursos, que se conocen por otras circunstancias. Siempre es difícil arrancar desde cero cuando no sabés cómo se hacen las cosas”. Por esa razón, explica: “Está bueno que el Centro de Estudiantes tenga alguien que más o menos pueda direccionarlos, para que no se sientan decepcionados por las cosas que pueden no llegar a salir como uno las espera”.

Dicha relación entre el tutor y los miembros del Centro implica un aprendizaje para el propio docente. Desde una perspectiva política, Moreno destaca el enorme valor del trabajo y la responsabilidad que tienen en sus manos los estudiantes de la actual gestión: “Sorprende mucho que ellos no se dan cuenta de dónde están: que son la representación del Centro de Estudiantes del colegio más tradicional de Carlos Paz. Es sorpresivo que no toman dimensión del lugar genial en que están parados y las cosas que pueden lograr”.
Si bien Moreno lleva poco tiempo trabajando con el Centro desde su rol de profesor tutor, tuvo la ocasión de conocer a la mayoría desde su lugar de docente. Eso le permite hacer una apreciación general sobre quienes llevan a cabo la gestión actual: “Sé qué son, primero, muy buenos estudiantes; son gente interesada en moverse, tienen voluntad de trabajar, de compartir o vehiculizar problemáticas que los atraviesan. Por ejemplo, están muy interesados por el tema de la visibilización de las disidencias sexuales, de las orientaciones sexuales o las identidades de género, los problemas de salud mental, que al parecer son temas que no se abordan demasiado. Tienen esas ganas de ayudar y de hacer cosas”.
Por último, Moreno subraya el notorio interés de los alumnos de los primeros años en participar del Centro, lo que resulta más que importante en la vida estudiantil del IES: “Hay una transversalidad de lo que puede proponer el Centro que está buena, porque hace a la idea de comunidad educativa, más allá de comunidad de gente que se educa o que enseña”.